Un auto de segunda puede ser una gran opción, pero hay que agudizar los sentidos y realizar una buena revisión antes de adquirirlo.
¿Piensas comprar un auto? En el mercado existen muchas opciones y una de ellas es adquirir un auto de segunda. Si bien esto nos permitirá ahorrar dinero debido a su menor costo, hay que tener en cuenta ciertos detalles a revisar para que nuestra compra sea segura.
Una vez hallado el auto de segunda que deseamos comprar, lo esencial es llevarlo a un taller o mecánico de confianza para una revisión exhaustiva.
Recuerde que si bien un auto de segunda puede lucir impecable por fuera, siempre puede ocultar problemas mecánicos que acerquen al vehículo al fin de su vida útil. Por eso acá te damos ciertos detalles que puedes verificar a simple vista.
Pedales y puertas
Lo primero que debes hacer con un auto de segunda es revisar el estado de los pedales, que sean fáciles de pisar y regresen a su posición original sin problemas. También observa el estado del jebe de las puertas. Ambos son indicadores claros del verdadero desgaste del auto
Ojo con las lunas
Revisa exhaustivamente las lunas y parabrisas del auto usado. Una pequeña rajadura, por más insignificante que parezca, puede crecer con el tiempo y no tendrás otra alternativa que cambiar toda la pieza.
Revisa la carrocería
Lo primero es fijarte en los parachoques y guardafangos, que son zonas propensas a golpes. También abre y cierra todas las puertas del auto usado, incluido el capot, para verificar que estén bien cuadradas. Un secreto es pasar un imán por la carrocería si en alguna zona no se pega es un indicio que tiene masilla, señal de que ha sido reparado.
Verifica el interior
Al ingresar al auto de segunda, da una mirada a los resortes de los asientos, también revisa que el tapiz esté en buen estado, no tenga huecos ni mayores desgastes. Este es otro punto para conocer el verdadero estado del vehículo.
Dale un vistazo a las llantas
Es vital que le des un ojo a los neumáticos del auto de segunda, estos deben lucir alineados y parejos. De no ser así será un problema tanto en el desgaste como en la seguridad, ya que afecta al frenado y la maniobrabilidad.
Escuche el motor
Encienda el auto, tómese el tiempo de escuchar al motor, sentir las revoluciones y evaluar que cada marcha es pareja.
Mire por debajo
No olvide revisar la parte de abajo del auto usado que piensa adquirir. Asegúrese que no tenga fugas y evalúe el estado de las partes. Por ejemplo, los amortiguadores no deben estar parchados.
Prueba de manejo
Pida que se le permita salir a dar una vuelta con el auto usado. Revise que luego de una curva el timón regrese solo a su posición, de no ser así hay un problema en la dirección y/o la carrocería puede estar torcida producto de una mala reparación tras un choque. Busque un lugar seguro donde hacer una frenada brusca. Tras detenerse el auto debe quedar derecho.
Papeles en regla
Es importante que todos los documentos que te entregan estén en regla. Acude a Registros Públicos para confirmar que la tarjeta de propiedad es correcta, que tenga su revisión técnica respectiva y que el auto de segunda no cuente con multas por pagar ni órdenes de captura.
Una vez que adquieras el auto es importante usar el lubricante adecuado para que el motor tenga un funcionamiento óptimo. Conoce cuál es el lubricante ideal según tu tipo de auto aquí.